Kyoto es el corazón de los japoneses, el centro de la cultura japonesa, y ahora es el centro turístico donde te lleva al tiempo antiguo de hace siglos.
Esta ciudad atrae no solamente a los turistas extranjeros que buscan el imágen típico de Japón tradicional sino también a nosotros mismos japoneses que hoy en día llevamos una vida moderna.
Desde el fin del Período de Nara (794), Kyoto ha funcionado como el centro de la historia y la política de Japón. Era la capital de Japón por más de 1000 años hasta que el Emperador se trasladó a Tokyo (digamos en 1868). Por esta historia, Kyoto ha sido el centro cultural de Japón y sigue siendo amado por los japoneses y también por la gente de todo el mundo.
La antigua capital Kyoto, cuyas tradiciones han madurado a través de los siglos, también ahora está haciendo avances sorprendentes.
Kyoto posee 17 sitios historiales registrados como el Património Cultural de UNESCO. Entre ellos, el Templo Kiyomizu-dera es el más famoso y más visitado en Kyoto.
También se han producido muchas artes religiosas y de entretenimiento, y mantenido innumerables rituales sintoístas y eventos religiosos.
Los tres festivales más grandes de Kyoto son:
1. Aoi-matsuri, en mayo
2. Guion-matsuri, en julio
3. Jidai-matsuri, en octubre
En todos estos festivales, la gente se viste del traje de la época antigua de Heian como del siglo 8 y hace procesión por el centro de la antigua capital. Te harían sentir como si hubieras viajado del tiempo antiguo. Obviamente para estas fechas muchísimas personas visitan Kyoto.
Para los que quieren ver a “Geisha”, el barrio Guion es el lugar. Pues las llamamos “Geiko” o “Maiko” en lugar de Geisha. Luego hablamos de este tema.
En Kyoto, hay muchos lugares y eventos que visitar, y artes y obras increíbles que observar con tus propios ojos. Son los que han mantenido por generación por generación por más de 1000 años. Ese espíritu y orgullo es el que hace lo que es la antigua capital Kyoto.
Desde aquí voy a presentar esta ciudad divina con toda riqueza cultural y belleza natural del corazón de los japoneses.
No hay comentarios:
Publicar un comentario